Por fin vuelvo a ponerme al día con American Horror Story
haciendo doblete este fin de semana, avanzo ya hasta el séptimo episodio,
quedando cinco entregas para un final del que ya he podido sacar algunas conclusiones.
En el anterior capítulo vimos como John perdía un poco más
la cabeza gracias en parte a su mujer, Liz Taylor sufría la muerte de Tristan y
la Condesa seguía con su plan de conquistar al millonario Will Drake, además de
darnos a conocer a su hijo.
ATENCIÓN, ESTA REVIEW
PUEDE CONTENER SPOILERS.
Este nuevo episodio comienza con la reconstrucción del hotel
donde dos obreros encuentran un muro en una de las paredes, preguntan por él a
Will Drake que pide que lo tiren abajo. Dicho muro da a un pasillo con
habitaciones de donde salen dos nuevos inquilinos del Cortez que asesinan a los
obreros.
Tras la intro vemos a John Lowe en un hospital psiquiátrico,
parece que ha hecho caso a su mujer pero nada más lejos de la realidad, John
quiere ingresar en el hospital para conseguir nuevas pistas sobre el caso que
llevaba y del que ha sido apartado.
Iris acompaña a la Condesa para enseñarle lo que ha sucedido
en la obra, algo que atemoriza a la Condesa un temor que es notorio para Iris.
Mientras tanto en una nueva habitación vemos a los nuevos inquilinos asesinando
a una mujer.
Para conocer más sobre dichos inquilinos vemos un flashback
situándonos en Hollywood 1925, donde vemos a una Condesa todavía mortal,
queriendo ser actriz de éxito en Hollywood y es aquí donde conoce a Rudolph
Valentino un atractivo actor de éxito que está casado con Natacha Rambova. Rudolph
invita a la Condesa a una cita en su casa y entre el matrimonio y la Condesa inician
un romance, un romance que se trunca cuando en la fiesta de inauguración del
Cortez, la Condesa conoce de la muerte de Rudolph, algo que le incita a
quitarse la vida, pero es el señor March quien la salva. La Condesa se
convierte en la viuda de Valentino y es en su tumba donde encuentra que
Valentino nunca murió, ya que el propio Valentino junto a Natacha y le cuenta
que todo es un plan para alejarse de la vida pública, pues ahora son inmortales
debido a un virus que han contraído, inmortalidad que quieren compartir con la
Condesa, algo que ella acepta pero también es oído por el señor March el que es
ahora el marido de la Condesa, pues ella se casó con él por puro interés tras
la supuesta muerte de Valentino.
Ya dentro del hospital psiquiátrico vemos a John buscando al
culpable de los asesinatos, para ello observa al guarda de seguridad del que se
deshace para ver al asesino, pero se sorprende al ver que es una niña,
presumiblemente una de las crías que se hospedan en el Cortez. Ella dice que no
es la asesina pero que vio como sucedía todo, cuenta los detalles a John y le
pide que la saque de allí para darle toda la información que necesita.
De vuelta en el hotel vemos a Rudolph y Natacha
regenerándose, pues necesitan sangre para volver a su mejor estado. Hablan
sobre el tiempo en el que han estado encerrados y Natacha recrimina a Valentino
porque por culpa de él y de la Condesa han sufrido encerrados en un pasillo y
cuatro paredes. Y es que fue el señor March quien les encerró en ese pasadizo
oculto del hotel para evitar que se marchasen con su esposa, la Condesa. Algo
que le confiesa el propio March a la Condesa en una comida acordada que tienen
una vez al mes. Algo que la Condesa desconocía y se sorprende y recrimina a
March. Rudolph y Natacha han retomado su mejor forma y se marchan del hotel,
aunque estoy seguro de que volverán.
Para cerrar el capítulo vemos a John escapando con la cría del
psiquiátrico una cría que se despide de él y se marcha sin darle una pista
clara, sólo le dice que el asesino vive en el Cortez. La chica sale corriendo y
desaparece en el cruce con un autobús algo que sorprende a John y que cierra el
capítulo.
En esta nueva entrega, American Horror Story cae en uno de
los errores que cometió en Freak Show y que está volviendo a hacer en esta
temporada, dejar de lado historias que avanzan con interés para centrarse en
otras y son dos las tramas que se ven en este episodio.
Por un lado vemos cómo la Condesa se convirtió en vampira y
quiénes son los dos nuevos huéspedes del Cortez que buscan venganza contra el
señor March. Ahora entendemos el por qué la Condesa se prendó tanto por Tristan
al que asesinó en el episodio de la semana anterior, una Condesa que por
primera vez en la temporada se ve atemorizada e intimidada por algo. También
descubrimos que la
Condesa se casó con el señor March algo que se presuponía
aunque nunca se haya dejado claro. Un señor March que encarceló en una
habitación donde han vivido durante años a los amantes de la Condesa mostrando
así de lo que era capaz.
También vemos como John avanza en solitario en el caso del
asesino en serie y se descubre que una niña vampiro de la Condesa ha sido
cómplice con el asesino, un asesino del que no hay pistas pero creo que será el
hijo de la Condesa como ya dije en la entrada anterior.
A pesar de que el episodio se haya centrado en estas dos
únicas tramas, he de decir que me ha parecido muy bueno, pues ha dejado grandes
avances y ha justificado bastantes cosas que estaban un poco en el aire. La
Condesa empieza a verse débil y es que a cada capítulo que pasa le salen nuevos
invitados y enemigos.
Esto fue todo en la séptima entrega de American Horror Story
que avanza en ciertas historias y aparca otras, sólo pido que finalice cada una
de las tramas y lo haga de una forma convincente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario