Nuevo episodio de Modern Family el que nos ofreció FOX España
esta semana, el decimotercero de la séptima temporada.
Un capítulo que a pesar de no contar con todos los
personajes de la famosa familia, vuelve a dejarnos grandes y divertidos
momentos.
ATENCIÓN, ESTA REVIEW
PUEDE CONTENER SPOILERS.
Este nuevo episodio comienza con Claire y Phil afrontando la
nueva situación de la familia, con Claire siendo directiva y Phil encargándose de
las tareas domésticas. Un Phil que es recompensado con un monociclo eléctrico cortesía
de su mujer.
También vemos la nueva vida de Jay junto a Gloria que pasean
por el supermercado y son sorprendidos por la figura de la propia Gloria para
promocionar la salsa que Gloria vende en el supermercado. Una figura de Gloria
tirando besos con una mano mecánica de forma sugerente. Algo que agrada al
público pero no a Jay, que siente celos de los demás hombres que se hacen fotos
con la figura de su mujer.
Mientras tanto, Cam y Mitchell comentan que han alquilado el
piso de arriba a unos misteriosos huéspedes: los señores Wilkerson y Tommy. Esperaban
una familia joven con un hijo pequeño y recibieron a un misterioso trio que no
les da muy buena espina. Al ver los ruidos que producen y su misteriosa forma
de ser, Cam decide pasar a la acción e investigar a sus alquilados. Mitchell se
opone pero esto no frena a Cam que se presenta en el domicilio para cotillear y
llega a la conclusión de que la señora Wilkerson ha pedido ayuda.
Manny también está molesto por la figura de su madre en el
supermercado ya que sus compañeros se burlan de él y cuando se encuentra con
Jay que le dice que ha robado la figura y que están juntos en el robo, ahora
queda destruirla, algo que Jay ha intentado y de momento no ha conseguido.
Cambiamos a la trama de Phil y Claire que están en una cena
de negocios y es aquí donde Phil empieza a darse cuenta al dialogar con las
mujeres de los socios de Claire de que se está transformando en una ama de
casa, algo que le preocupa bastante.
Gloria pide a Jay que le lleve a casa de Phil para trabajar
en su página Web y recibe un e-mail de
la tienda diciendo que han robado su poster. Manny con remordimientos sufre por
ocultar la verdad y Jay le mantiene a raya para que no se vaya de la lengua.
Ya en casa de Phil hablan sobre el robo de la figura de
Gloria y Claire sigue dando muestras a Phil de su nueva posición, un Phil que
se desahoga con Gloria que le aconseja sobre dicha situación ya que ella
también la sufrió con Jay.
Cam sigue investigando sobre sus misteriosos vecinos y mete
a la pequeña Lily en la trama haciendo que busque en la basura de sus vecinos.
Al ver esto, Mitchell se enfada y pide a Cam que salga a un recado, pero la
curiosidad le puede y es él quien decide investigar a sus vecinos y se cuela en
su casa, donde descubre unas cuantas mesas plagadas de una especie de figuras
decorativas, los vecinos vuelven a casa antes de tiempo y el torpe Mitchell en
su afán de esconderse rompe una figura. Mitchell llama a un Cam que también
estaba cotilleando a sus vecinos y que le ayuda para salir de ese entramado en
el que se había metido, haciendo que Cam invite a sus vecinos a tomar algo en
casa. Es ahí cuando descubre que sus vecinos son coleccionistas de figuras de
cerámica. Mientras tanto, Mitchell al devolver la figura, hace gala de su torpeza
nuevamente y destruye todas las figuras de cerámica en un desafortunado accidente.
Jay junto a Manny termina de destruir el poster de su mujer
que casi les pilla y que “recibe” su propia cabeza por error. Esto hace que
Gloria piense que ha sido su rival en la venta de salsas la que robó su figura
y le manda a unos sicarios. Esto hace que Jay confiese y se excuse en sus celos
para haberlo hecho.
Finalmente, Phil va a la oficina de Claire a decirle lo que
piensa sobre su nueva situación pero es sorprendido por Claire que le confiesa
que está asustada y superada por la situación. Phil se da cuenta de cómo se siente
su mujer y la tranquiliza para que siga adelante en su nuevo trabajo.
En los extras, vemos a un Phil sonámbulo paseando con su monociclo
eléctrico para cerrar el capítulo.
En líneas generales podemos decir que este episodio supera y
por mucho al de la semana anterior. Las tramas son más divertidas y a pesar de
tener final feliz como suelen tener siempre, muestran mejor contenido y dan
mejores momentos.
La trama de Phil descubriendo que se ha convertido en una
ama de casa es bastante divertida y el uso de su monociclo eléctrico nos deja
momentos muy divertidos. Un Phil que aunque finalmente se da cuenta de que su
situación ha cambiado sigue apoyando a su mujer, Claire que a pesar de ser
fuerte tiene un momento de debilidad.
En cambio la trama de Cam y Mitchell a pesar de haber sido
la más divertida, es a la que peor final le han dado. Hubiese sido divertido
ver a sus misteriosos vecinos descubriendo a Mitchell rompiendo todas sus
figuras. Un Mitchell que a pesar de que critica con dureza a Cam por ser
demasiado cotilla cae en el mismo juego y termina siendo tan cotilla como el
carismático Cam.
Por último, Jay no termina de aceptar que otros hombres se
fijen en su mujer y aporta también una trama divertida donde no puede con un
trozo de madera, y ve como una figura de su propia mujer le amarga la vida al
no poder destruirla.
A pesar de la ausencia de los hijos de la familia Dunphy, el
capítulo ha tenido unas tramas igualadas en lo que a interés se refiere y con
momentos cómicos en todas, algo que no siempre sucede.
Esto fue todo esta semana, y la próxima semana tendremos una
nueva entrega de esta disparatada familia.
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