Nueva jornada de liga, nuevo partido del Betis y nueva
derrota del equipo verdiblanco. En esta ocasión ante la Real Sociedad como
visitante. Una derrota que frena la evolución que el equipo había demostrado en
las dos últimas jornadas.
Y es que el Betis es así, lo mismo le hace un gran partido
al Real Madrid que hace una primera parte mediocre cuanto menos ante un equipo
de su liga y nivel como la Real Sociedad. Y es que, el Betis salió algo lento y
fallón al partido, mientras la Real salió muy bien posicionada y con mucha más
presión que la del equipo verdiblanco.
Pronto se hizo dueña y señora del balón y el Betis no sabía
cómo contrarrestar el juego de la Real, que intentaba y llegaba con cierta
claridad a la portería bética. Y en una de esas llegadas, Xabi Prieto adelantó
al equipo de San Sebastián al rematar un buen centro de Héctor Hernández que
acabó en las redes de la portería defendida por Adán.
El Betis tras el gol siguió fallón, errando mucho en los
pases y le costaba y mucho salir de su campo gracias a la presión del equipo
blanquiazul. La Real se sentía realmente cómoda sobre el verde y sin apenas
esfuerzo dominaba el partido a placer. De hecho, en una jugada a balón parado
aumentó la ventaja en el marcador con un gol de Iñigo Martínez que marcaba a
placer una falta botada por Rubén Pardo.
En los doce minutos restantes, el Betis intentó recortar
distancias sin éxito y es que el planteamiento desarrollado por Merino hoy no
funcionaba ante una Real que se encontró una ventaja de dos goles sin apenas
haber tenido más ocasiones en el partido que las que ocasionaron sus goles.
En el descanso, Merino debió aleccionar a sus jugadores e
introdujo dos cambios claramente ofensivos con la intención de remontar el
partido o al menos intentarlo. Retiró del terreno de juego a Molinero y a
Fabián, haciendo pasar a Cejudo al lateral derecho e introdujo a Joaquín y
Ricky Van Wolfswinkel. Cambió de un 4-5-1 a un 4-4-2 y a decir verdad, el
equipo mejoró.
De hecho, sólo tardó unos seis minutos en recortar
distancias en el marcador con un gol de Rubén Castro que marcaba a puerta vacía
y que rompía una sequía goleadora que duraba ya 9 jornadas. El pase se lo brindó
un Van Wolfswinkel que se mostró muy activo desde que entró al terreno de
juego.
El equipo verdiblanco se vino arriba y empezó a dominar el
partido intentando así empatar el encuentro sin éxito, eso sí. La Real
intentaba mantener el ritmo que marcó en la primera parte pero el Betis metió
una marcha más y por momentos se vio superior a la Real y aunque tuvo ocasiones
no conseguía empatar el partido.
Conforme pasaba el tiempo, la Real seguía manteniendo el
ritmo con menor dificultad y el Betis bajó el ritmo, se le veía cansado y el
partido se volvió más disputado, con la Real intentando ampliar distancia sin
mucho peligro. Hubo una ocasión clara para el equipo vasco pero Adán la detuvo
sin mucha dificultad. El Betis en cambio seguía intentándolo sin éxito y para
dar un último empujón metió a Ceballos por Varela, un Ceballos que fue
protagonista de un posible penalti sobre él y que el árbitro no pitó. En mi
opinión, aunque no muy claro eso sí, era penalti. Un penal que hubiese podido
suponer el empate del equipo bético.
Tras esto, la Real defendía esperando el final del partido y
el Betis a la desesperada aunque con las ideas un poco nubladas, intentando
empatar. Finalmente no pudo ser y el árbitro no ayudó a ello ya que sólo añadió
dos minutos de añadido y uno se perdió entre una falta y las airadas protestas
de Joaquín por el poco tiempo extra.
Un partido del que merecimos aunque sea sacar un punto y que
frena un poco la evolución del equipo como dije antes, pero ya de nada sirve
pensar en ello y a preparar el partido ante el Valencia en casa con las nuevas
incorporaciones.
La primera parte fue bastante mala y aunque se mejoró en la
segunda, no fue suficiente para sacar puntos de Anoeta. El equipo sigue fuera
de los puestos de descenso pero no debe perdonar ni un partido más y seguir
sumando para conseguir cuanto antes la permanencia, que estoy seguro que se conseguirá
y también estoy seguro de que los refuerzos aportarán su granito de arena para
conseguirla. ¡Vamos Betis!
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