Partido intersemanal ante un rival directo y que se antojaba
vital por varios motivos. El principal de ellos, hacerse con la permanencia de forma
prácticamente definitiva, el segundo de ellos y más por el aspecto anímico que
por otra cosa, ir con victoria al derbi sevillano que se jugará el próximo
Domingo. Nuestro rival, Las Palmas.
Para afrontar este partido, se mantenía el sistema y se
daban dos cambios en el once: Varela salía de su ostracismo con Merino para
acabar sustituyendo a Montoya que se encuentra lesionado y Kadir volvía al once
por Musonda que arrastraba molestias y finalmente no fue de la partida.
El partido iniciaba con el equipo de Las Palmas muy bien
posicionado en el césped, con el Betis metido en su campo esperando a salir a
la contra algo que no gustaba a la afición y es lógico. Es cierto que ninguno
de los dos equipos llegaba con claridad ni tenía ocasiones claras, como también
lo es que aunque Las Palmas tenía la posesión, era el Betis quien tenía las
ocasiones más clarividentes, con Rubén Castro anotando el primer gol del
partido que era anulado por fuera de juego. Un fuera de juego que en mi opinión
no lo era, pues en una repetición lanzada en el segundo tiempo se vio como Rubén
estaba en línea con Garrido.
En lo que restó de la primera parte, la tónica del encuentro
fue la misma, con posesión para Las Palmas y oportunidades para el Betis, pero
antes de llegar al descanso, el equipo canario se quedaba con un jugador menos
por la expulsión de Aythami por doble amarilla, una expulsión que dicen fue demasiado
rigurosa pero que considero que fue justa, pues hizo dos faltas bastante claras
y debían ser castigadas. Después de la expulsión que se dio en el minuto 41,
apenas hubo actividad y se llegaba al descanso con el empate sin goles en un
partido que apenas tuvo emoción e interés.
Tras el descanso, el equipo bético salía con energías
renovadas y gracias a su superioridad sobre el verde imponía su juego y tomaba
el mando del partido a base de posesión. Es cierto que el equipo amarillo tuvo
alguna oportunidad en algunas jugadas a balón parado pero ninguna llevó peligro
real a la portería defendida por Adán.
El equipo local mantenía el balón pero no tenía ocasiones
claras de gol, por lo que Merino decidió mover el banquillo y en el 53, Kadir
abandonaba el partido para dar entrada a Charly Musonda, con el objetivo de
buscar desequilibrio y velocidad.
Tras el cambio, Las Palmas sacaba un saque de esquina sin
crear peligro y tras dicho saque era Cejudo quien entraba al campo por Molinero
pasando a ocupar la posición de lateral derecho en el minuto 57. Tras el
cambio, nada cambió, nunca mejor dicho y el Betis controlaba el partido pese a
la igualdad en el marcador. No tenía ocasiones claras de gol pese a asediar al
equipo de las islas.
Finalmente, el tercer cambio que realizó el Betis fue la
entrada de Van Wolfswinkel que entraba por Varela en un cambio claramente
ofensivo y que se hizo clave en el encuentro. Tras la tercera y última
sustitución, Ceballos tenía las mejores oportunidades para el Betis y finalmente
fue el canterano el que con un buen pase dejó a Van Wolfswinkel de cara a la
portería y el holandés transformó el único gol legal del partido que terminó
dando los tres puntos al Betis.
Con el gol, Las Palmas intentó replegarse más en ataque pero
con el cansancio acumulado y un jugador menos sobre el terreno de juego se
antojaba difícil empatar el partido. La única ocasión clara desde entonces
hasta el final del partido llegaba con Joaquín como protagonista que remató alto
un centro. Hubo tres minutos de añadido y la verdad es que no se vio nada de
interés en ellos.
Siendo franco, el partido ha sido bastante malo, sobretodo
en su primera parte, con un Betis bastante cerrado ante un rival que sin
ocasiones claras, creaba cierta incomodidad a los béticos. Tras la expulsión y
con uno más, era de esperar la reacción bética y todo lo que no fuese ganar el
partido para mí era un fracaso.
Es cierto que en la segunda parte tuvimos el control de la
pelota y creamos más juego y ocasiones pero también lo es que lo hicimos porque
jugábamos con uno más, en un once contra once no creo que el Betis hubiese
tenido esa actitud en el partido. Lo que me parece preocupante es lo que nos
cuesta hacer gol y es que solamente Van Wolfswinkel conseguía traspasar la línea
de gol con una buena acción que terminaba con el balón en el fondo de la red.
Tres puntos y gracias, ya que el partido estaba para el empate
sin goles pero con la expulsión de Aythami y el gol de Van Wolfswinkel
ganábamos tres puntos que nos dejan con la permanencia prácticamente conseguida
y moraliza al equipo de cara al derbi del próximo Domingo.
El juego del equipo sigue sin ser bueno, nos cuesta crear
ocasiones pero en el partido de hoy tampoco nos las han creado. Lo importante
de aquí a final de temporada es probar e intentar jugar lo mejor posible y
quedar en lo más alto que podamos, ya que la permanencia está hecha que es lo
importante. Cinco partidos más y a pensar en la próxima temporada.
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